
Hoy se jubila Maite, se jubila también Marisa. Nunca he coincidido con ellas en los 30 años que llevan volando en la compañía.
Es Nochebuena y aquí estamos los doce, cruzando meridianos a Mach .85, esquivando tormentas, surfeando los vientos del Atlántico para llegar a cenar a casa, aunque sea con escafandra.
Pasamos media vida aquí colgados, volando, rodeados de extraños que no lo son tanto porque con ellos nos acabamos confesando, acabamos compartiendo casi más que con los que nos esperan abajo.
Y así nos pasamos la vida, celebrando las penas, llorando las alegrías, bailando y vomitando entre extraños, colgados aquí arriba, extraños que acaban siendo nuestra otra familia.
Desde el 30 oeste, a un lado América, a otro Europa, con viento en cola a toda vela…
FELIZ NAVIDAD, querida familia.

Debe estar conectado para enviar un comentario.